Los relojes de pared son elementos que inspiran romanticismo lo que aporta siempre un punto de calidez a la decoración. Quizás sea porque al medir el tiempo evocan recuerdos de nuestro pasado o porque nos hacen soñar imaginando cómo será el futuro…Combinando varios relojes de diferentes tamaños distribuidos por toda una pared creamos un efecto foto-mural o de papel decorativo estampado de suelo a techo. Esta idea funcionaría también muy bien mezclando los relojes con otros objetos como marcos o espejos.